¡Saludos!
He aquí un nuevo iluminado y novel escritor tratando de abrirse un hueco en el mundo editorial, para lo cuál comienza a escribir un blog en el que irá dejando alguno de sus textos.
Original, ¿a que sí?
Dudo muuucho que las probabilidades de que una editorial me reclute crezcan siquiera un poco, pero por lo menos intentarlo, pasar el rato, dar a conocer lo que escribo y que algún alma caritativa me diga a las claras: "Tus textos no valen una mierda, retírate y dedícate a otra cosa" Desde luego prefiero que me digan éso, me serviría para hacer un esfuerzo y tratar de mejorar, que no que me ignoren. Pero bueno, a ver qué sale, a algunos grupos de música les funciona, ¿no?
En cuanto a mi género predilecto de la literatura, sin duda, la literatura fantástica, tan menospreciada en algunos casos, pero por suerte cada vez menos.
¿Qué me hizo empezar a escribir? Sencillo. Cada vez que iba a una libreria me encontraba con que la mayoría de los libros de género fantástico, por no decir todos, seguían el siguiente esquema: "Un Dios oscuro, cuyo nombre no debe ser pronunciado, pero que la gente de hoy en día ha olvidado, porque miles de años atrás fue derrotado y destruido, retorna al mundo mortal con la misma mala idea de conquistar el mundo. Para ello, se hace con una profunda cueva y convoca a los seres oscuros y deformes que ya le habían servido y comienza poco a poco a extender la oscuridad. Sólo un joven humilde puede detenerle, aunque aún no lo sabe" Libros de este estilo o muy similar pueblan las estanterías fantásticas, y es algo que a mí me ha agotado. Con todo el respeto para sus autores, por supuesto, no estoy diciendo que sean malos libros, sólo digo que, personalmente, estoy cansado de ellos y que la sombra de Tolkien es muy larga.
Sólo tres sagas fantásticas conozco que no se rigen por la regla del dios oscuro: "Canción de Hielo y Fuego", de George RR Martin; "La Saga de Geralt de Rivia", de Andzrej Sapkowski; y el excelso "El Nombre del Viento" de Patrick Rothfuss que me encantó. ¡Quién pudiera escribir un primer libro la mitad de bueno! Por cierto, si alguien conoce otro libro que no haya mencionado, ruego me lo haga saber.
Así pues, yo mismo me puse manos a la obra a escribir mi propio libro fantástico, renunciando por supuesto a un dios oscuro, el ser humano siempre ha buscado la mejor manera de matarse a sí mismo, una guerra puede ser igual de emocionante si los que combaten son sólo hombres, lo único necesario es contarlo bien. Como apuesta personal, también renuncié a la magia, no creo que sea estrictamente necesaria, aunque a largo plazo podría..., quizás si me presento, que probablemente lo haré, al Premio Minotauro, cuente la historia de... pero bueno ya se verá cuando se tenga que ver. De momento, tras enviar mi manuscrito a varias direcciones, la mayoría de las mismas simplemente me ignoran. Quizás no fue buena idea enviarlo aún a la mitad, pero creo yo que tras doscientas páginas ya sabes si una historia te engancha o no. En cualquier caso, sigo esperando con la ilusión intacta.
Creo que ya bastó por hoy, en unos días colgaré el primer texto.
Saludos.
¡Toda pajar guarda una aguja! Y seguro, ¡Toda aguja quiere un pajar!
ResponderEliminarMuy apreciable Alberto, no voy a descalificar tu esfuerzo, sino al contrario, lo voy a utilizar. Si me lo permites, te suplico accedas a mi blog www.literaliamexico.blogspot.com. En respuesta, publicaré una entrada mencionándote, haciendo hincapié en tu frase: "...me serviría para hacer un esfuerzo y tratar de mejorar, pero que no que me ignoren..."
Espero tu comentario.
Afectuosamente: Arturo Juárez Muñoz
Querido Alberto:
ResponderEliminarTe conocí a través de Literalia México, llamando mi atención la entrada publicada.
Hoy pasé por tu blog y paraciera que nada ha pasado en tu vida.
Corrígeme, por favor.